El inminente impacto sobre la tierra de una tormenta solar es algo de lo que se está hablando estos últimos meses. Se trata de un fenómeno relacionado con las erupciones solares y su influencia sobre nuestro planeta.
¿ Qué es una tormenta solar ?
Son emisiones masivas de radiación electromagnética expulsadas por el Sol. A estas emisiones se las conoce con el nombre de erupciones solares, dado que su resultado es muy parecido al de un volcán: al igual que los volcanes, cuando se produce una tormenta solar, el Sol expulsa, no lava, sino inmensas llamaradas de plasma cargadas magnéticamente que viajan a través del sistema solar, y que, en ocasiones, pueden encontrar al planeta tierra en su camino.
¿ Son frecuentes las tormentas solares ?
Las tormentas solares son un fenómeno frecuente en la superficie solar, si bien suelen ser más abundantes cada 11 años, al finalizar cada ciclo de actividad solar, en el que los campos magnéticos del sol cambian de polaridad, esto es, se invierten los polos norte y sur.
A pesar de ser un fenómeno frecuente, pocas veces tienen un efecto directo sobre nuestro planeta, bien porque no son lo suficientemente potentes para alcanzarnos, o porque la emisión no se llega a cruzar con la tierra
¿ Realmente pueden llegar a afectarnos ?
Los daños que puede llegar a causar, aunque pueden ser considerables, es muy poco probable que realmente lleguen a afectarnos, dado que la tierra cuenta con un “escudo protector” llamado magnetosfera que desvía la mayoría de las radiaciones solares hacia los polos del planeta, dando lugar al fenónemo conocido como aurora boreal.
En la historia de la humanidad, el caso más conocido de cómo puede llegar a afectarnos este viento solar, es el conocido como Evento Carrintong, ocurrido en 1859 y llamado así en honor a su descubridor, Richard Carrintong. Dado el prácticamente nulo uso de la tecnología el siglo XIX, sus efectos no fueron relevantes, si bien sí se dieron interrupciones en las redes del telégrafo, que, por otra parte, era el único sistema de comunicaciones conocido en aquellos días.
Según la información obtenida por los científicos solares, una erupción de tan alta intensidad como la de 1859, se suele producir alrededor de cada 500 años, pero suele ser frecuente que nos alcance una tormenta solar relativamente fuerte cada 50 años, siendo la última registrada de magnitud fuerte en 1960
En nuestra sociedad, totalmente dominada por la tecnología de las comunicaciones, una erupción solar de alta intensidad tendrá un efecto directo sobre los satélites que orbitan en torno a la Tierra, mucho más expuestos a la radiación solar y podría afectar negativamente a los satélites de comunicaciones y a los sistemas de navegación GPS
También existe una posibilidad, mucho menos probable, de que llegue a afectar a las redes de comunicaciones terrestres y sistemas eléctricos, que pueden producir perturbaciones en las señales de radio y de telefonía móvil y, de manera excepcional, la interrupción del suministro en la red eléctrica
Magnetismo peligroso que podría ocasionar una tomenta solar | Infografía El Nacional
En su novela, Tormenta Solar, Cristina Gumuzio nos sitúa en un futuro no muy lejano, en el que durante la noche una tormenta solar sin precedentes impacta sobre la Tierra y literalmente apaga el mundo que conocemos y al que estamos acostumbrados.
A lo largo de la novela, sus personajes luchan por adaptarse a un nuevo mundo, tremendamente hostil y del que han desaparecido todos los elementos que conforman nuestra civilización: luz, agua potable, medicamentos, tiendas, medios de transporte, teléfonos e Internet dejan de funcionar obligando a la humanidad a buscar nuevas fórmulas para sobrevivir. Los estados tratan de controlar la situación imponiendo su autoridad y la solidaridad entre la población se convierte en el principal salvoconducto para la supervivencia.
Una interesante visión de un futuro al cual, tal vez, tengamos que hacer frente tarde o temprano.
Tormenta solar
Inmersos en este mundo futuro sin esperanza, los protagonistas de esta novela Nora y Jaime, luchan por construir un mundo mejor para sus hijos y la futura humanidad.
